Revocatoria a Daniel Quintero, el capricho del Uribismo que le valdría 20 mil millones al país

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POR: POLIDEPORTIVO
EL RECOMENDADO DE HOY DE: Robinson López

Cartagena de Indias, D.T. y C., 23 de junio del 2021.*12:09 p.m.

Revocatoria a Daniel Quintero, el capricho del Uribismo que le valdría 20 mil millones al país. Aunque están en todo su derecho, y las revocatorias a los mandatarios locales son constitucionales, la que impulsan en Medellín contra el alcalde Daniel Quintero obedece más a un nuevo capricho del nefasto uribismo que en esta ocasión es apoyado por el Fajardismo en Antioquia.

Huérfanos de poder, en uno de los departamentos más importantes del país, dónde venían cogobernando los últimos 20 años y dónde además el uribismo se creía invencible, promueven llenos de odió lo que ellos han denominado » la recuperación del poder».

¿Por qué es un Capricho? Aunque el proceso revocatorio adelantado por movimientos y líderes políticos (ex candidatos) del uribismo y el Fajardismo en Medellín cumpliera con todos los pasos que ordena la ley, estos deben ser avalados por el Concejo Nacional Electoral (CNE) quien finalmente avalará si este mecanismo de control ciudadano sigue su curso, teniendo en cuenta el cumplimiento al plan de desarrollo de la Medellín Futuro del actual alcalde que para este caso supera el 50% según informes de rendición de cuentas, en solo 19 meses de ejecución a pesar de estar administrando en medio de una fuerte pandemia.

Aunque existen otras interpretaciones jurídicas sobre si es el CNE quien debe avalar o no, es claro que el equipo jurídico del alcalde apelará de ser necesario a la ley de participación ciudadana quien para el caso fija los requisitos.

Malos perdedores que no superan la tusa de haber perdido en las urnas y que ahora no les importa someter al estado a un gasto innecesario, en momentos en que el país atraviesa una de las más fuertes crisis sociales y económicas, sería la definición menos ofensiva para quienes hoy promueven destituir un alcalde que ganó un mandado legítimo en las urnas, dado por una ciudadanía libre que votó y creyó en un plan de gobierno para cuatro años y que hoy deberá negarse y a los caprichos politiqueros de quienes se creen dueños de la verdad y la moral y que lo único que han hecho es vivir del erario público.

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